07-02-2023 · Perspectiva mensual

Es el momento de volver a los mercados emergentes

Según el estratega multiactivo de Robeco, Arnout van Rijn, los mercados emergentes son los que ofrecen ahora mayor potencial alcista, ya que los problemas económicos siguen atenazando a los mercados desarrollados.

Como explica Van Rijn, estratega de soluciones multiactivo sostenibles de Robeco, las carteras multiactivo de Robeco sobreponderan ahora los valores de mercados emergentes, después de muchos años en los que esta clase de activo se quedó rezagada. Entre los factores a favor se incluye el hecho de que sus bancos centrales no se embarcaron en las inflacionistas políticas QE de creación de dinero seguidas en Occidente.


Por otra parte, muchos mercados desarrollados se enfrentan a una posible recesión, al tratar los bancos centrales de combatir una inflación disparada con la subida de los tipos de interés como su principal herramienta, afirma Van Rijn. Ello ofrece un diferencial de rentabilidad significativo, como ha señalado el equipo en sus perspectivas Expected Returns 2023-2027.

“Siempre se ha vendido que los mercados emergentes ofrecen mayor riesgo y rentabilidad, al calor de un crecimiento económico superior”, según este experto. “Si analizamos su patrón de comportamiento desde 1992, año que marca el nacimiento de esta clase de activo, este patrón no se cumple. En su lugar, hemos tenido dos enormes y prolongadas ondas alcistas, y dos períodos decepcionantes con peor rendimiento relativo, sobre todo los diez últimos años”.

“Últimamente somos más optimistas sobre los mercados emergentes y hemos sobreponderado nuestras carteras, canalizando fondos desde los mercados desarrollados, pero nos mantenemos neutrales en el conjunto de la renta variable global. Creemos que podemos estar al principio de un nuevo repunte relativo que podría durar años”.

“En nuestras perspectivas a cinco años Expected Returns del pasado septiembre preveíamos una rentabilidad anualizada del 4,0% en los mercados desarrollados, y del 5,25% para los mercados emergentes. Consideramos que esa previsión a largo plazo es de gran relevancia en la actualidad desde un punto de vista táctico. Ahora es el momento de comprar”.

Desacoplarse de EE.UU.

Según Van Rijn, una de las cuestiones a vigilar es la de si los mercados emergentes pueden desvincularse de EE.UU. De ser así, empezarán a seguir el liderazgo de China más que el de EE.UU., aunque la creciente fortaleza china y su gran alcance limita los beneficios de la diversificación entre los distintos países.

“EE.UU. domina en el mundo desarrollado, mientras que, en los mercados emergentes China es, con diferencia, la mayor ponderación del índice”, afirma Van Rijn. “Sin embargo, ambas series de rentabilidades están determinadas por lo que pasa en EE.UU. Se mueven al alza o a la baja al mismo tiempo pero, a la postre, EE.UU. ha ofrecido muchos mejores rendimientos en la última década”.

“Tenemos el convencimiento de que hay una posibilidad razonable de que los mercados emergentes se desacoplen, de la mano de la recuperación no sincronizada que se registra en China y del efecto positivo que ello tendrá en el resto de Asia. Por sectores, el panorama también es distinto en los mercados emergentes, con un papel más destacado de finanzas y semiconductores. En ocasiones anteriores hemos comentado el optimistas perspectivas que suscitan los microchips”.

Ortodoxia de los bancos centrales

Para Van Rijn, la disparidad existente entre los bancos centrales y los enormes programas de expansión cuantitativa también juega a favor de los mercados emergentes. “En un mundo en el que las políticas monetarias no convencionales se han convertido en lo habitual, los bancos centrales de mercados emergentes destacan por su ortodoxia”, comenta.

“Incluso durante los peores momentos del Covid en 2020, pocas economías emergentes exhibieron un crecimientos superior al 10% en su agregado monetario M2, cifra muy moderada en comparación con la abundancia monetaria de EE.UU. (crecimiento del M2 superior al 25%), la UE (más del 12%) o Japón (10%).”

“Eso significa que la causa última de inflación en los mercados desarrollados, la creación de dinero, no existe en el universo de los mercados emergentes”.

Consecuencias de la fortaleza del dólar

“La fortaleza del dólar de los últimos años ha propiciado una política monetaria bastante estricta en muchos mercados emergentes. Aunque la probabilidad de un recorte de tipos es bastante elevada en 2023, no estamos tan seguros de un posible pivote de la Reserva Federal, que es lo que ha sustentado el reciente rally en EE.UU.”

“Las cifras de inflación son mucho más favorables en los principales mercados emergentes, con unos tipos de interés que también son superiores. No hay duda de que los mayores tipos de interés y las perspectivas de que la inflación haga máximos ofrecen más margen de relajación del que vaticinamos para EE.UU. y Europa, donde los mercados esperan el pivote de la Fed sin estar convencidos del todo”.

Los bonos de mercados emergentes también son relativamente atractivos, señala Van Rijn, aunque advierte del riesgo añadido que algunos valores entrañan. “Los diferenciales siguen elevados en el crédito asiático, pero no hay que caer en la trampa de los arriesgados bonos inmobiliarios chinos”, puntualiza. “En general, contemplamos unos diferenciales de 200-250 pb; puede parecer poco pero, al contrario que en Europa o EE.UU. no detectamos riesgo de recesión”.