17-03-2021 · Visión

Divulgación del riesgo de sostenibilidad de las carteras

Uno de los requisitos que impone el Reglamento sobre divulgación de información relativa a las inversiones sostenibles (SFDR) a los gestores de activos es informar sobre los riesgos de sostenibilidad inherentes a sus inversiones. En este documento, Wouter Kuijpers, asesor sénior sobre actualidad jurídica, y Nico Becx, gestor de riesgos financieros sénior, responden a algunas de las preguntas que nos han hecho los clientes.

    Autores/Autoras

  • Wouter Kuijpers - Senior Counsel Legal Developments

    Wouter Kuijpers

    Senior Counsel Legal Developments

  • Nico Becx - Director, Manager Financial Risk Oversight

    Nico Becx

    Director, Manager Financial Risk Oversight

¿Qué es el requisito de integración del riesgo de sostenibilidad?

Un componente clave del nuevo Reglamento SFDR es que obliga a los gestores de activos a informar mejor sobre cómo integran los principales riesgos relacionados con la sostenibilidad en sus estrategias de inversión. También es muy importante que deben revelar el impacto probable que tales riesgos puedan tener sobre el rendimiento de los productos de inversión a lo largo del tiempo. Con décadas de experiencia en integración de factores ASG, la necesidad de considerar estos riesgos en el proceso de inversión no es algo nuevo para Robeco. Pero, en el sector de la gestión de activos, todavía hacen falta divulgaciones más detalladas y esto podría afectar a quienes no se han preparado para ello.

¿Qué implica en la práctica?

De manera general, el nuevo Reglamento exige a los gestores de activos que integren riesgos de sostenibilidad en sus carteras, procedimientos de gestión del riesgo y estructuras de gobierno corporativo de toda la entidad. Tienen que ser absolutamente transparentes en cuanto a la incorporación de la sostenibilidad en sus estrategias, así como en la divulgación de su manera de integrar los riesgos de sostenibilidad en las decisiones de inversión de cada producto. Ello conlleva la elaboración de informes detallados sobre los procesos de inversión y las prácticas de gestión del riesgo, así como perfiles de sostenibilidad de las carteras. ¡Es mucho trabajo!

¿Cómo se definen los riesgos de sostenibilidad?


De manera general, los riesgos de sostenibilidad se pueden definir como factores ambientales, sociales o de gobierno corporativo (ASG) que pueden causar un impacto material negativo potencial o real en el valor de una inversión. Algunos ejemplos conocidos son los riesgos relacionados con el clima, como los de las empresas con una huella de carbono elevada, o problemas sociales importantes, o de mala gestión. Cabe mencionar que estos riesgos se pueden materializar en los ámbitos internacional, regional, de entidad o de producto, es decir, que se pueden dar en todo el espectro. Del mismo modo, distintos riesgos pueden afectar a distintas clases de activos de maneras diferentes.

¿No ofrece también oportunidades?

Aunque los factores de sostenibilidad pueden tener impactos positivos (oportunidades), los riesgos de sostenibilidad, para el propósito de la integración, se pueden considerar como la materialización negativa de los factores ASG. La sostenibilidad como factor de riesgo se suele aplicar a todas las inversiones, mientras que las oportunidades de la sostenibilidad suelen ser relevantes para los productos que tienen un objetivo ASG. Por lo tanto, para los gestores de activos, es fundamental evaluar con cuidado la materialidad financiera de los riesgos de sostenibilidad, aplicando un enfoque proporcionado y basado en los riesgos.

¿Qué hace Robeco?

Robeco integra de manera rutinaria los riesgos de sostenibilidad relevantes en todos los aspectos de sus estrategias de inversión, en todo el espectro de los fondos de sostenibilidad a medida, de renta variable basados en fundamentales, de renta fija y cuantitativos. También integramos los factores ASG en soluciones a medida para clientes por encargo y en toda la organización. Esto incluye procesos de análisis y decisiones de inversión, gestión de riesgos, gobernanza de productos y evaluación de la idoneidad de clientes, con las estrategias de gobierno corporativo de Robeco en torno a ello.

¿Cuál es el mayor riesgo?

El riesgo del cambio climático es indiscutible. Los efectos del calentamiento global son el primer punto de las agendas de los medios, los inversores y la sociedad en general, alimentado por los casos de incendios e inundaciones incontrolables. Examinamos los riesgos financieros que supone una inversión que puede contribuir al calentamiento global o verse afectada por ello. Tras la adopción del Acuerdo de París, gobiernos de todo el mundo se esfuerzan por cambiar a economías más circulares con menor huella de carbono. El Pacto Verde Europeo aspira a conseguir que Europa sea el primer continente climáticamente neutro en 2050. Se espera que los inversores desempeñen un papel importante en este sentido, como se recoge en el Plan de Acción sobre finanzas sostenibles de la UE y el SFDR.

¿El riesgo del clima no se limita a inversiones de elevada huella de carbono?

No. Robeco considera que el cambio climático es un riesgo de carácter integral, con un efecto financiero material en todas sus estrategias de inversión. Lo recalcamos con nuestro compromiso con las recomendaciones establecidas por el Grupo de Trabajo sobre Divulgación de Información Financiera relacionada con el Clima, así como nuestros compromisos con el Acuerdo Nacional del Clima de los Países Bajos. En nuestra Hoja de Ruta Cero Neto también asumimos el compromiso de descarbonizar todas las carteras para 2050. La propia transición a una economía más circular con baja huella de carbono conlleva riesgos para las empresas que cambian sus modelos de negocio, mientras que los daños físicos provocados por los climas extremos nos afectan a casi todos. También está el riesgo de denuncias por daños debidos al clima, así como reclamaciones de aseguradoras.

Si todo está cambiando, ¿cómo se puede evaluar este tipo de riesgo?

Robeco aplica una estrategia orientada al futuro al realizar análisis de escenarios de cambio climático, que permiten medir riesgos mediante herramientas propias y con proveedores de datos externos. El principal problema con los datos es que, por definición, pertenecen al pasado. Por eso, aplicamos más análisis de escenarios orientados al futuro, como el valor climático en riesgo (Climate VaR) para evaluar el impacto probable de los riesgos en los rendimientos de las participaciones. Aun así, aunque evaluar estos riesgos ya es un buen comienzo, es esencial que los inversores procuren mitigar estos riesgos a largo plazo. Para ello, nuestros equipos de inversión emplean una gran variedad de elementos esenciales para la sostenibilidad que tienen a su disposición, desarrollados a lo largo de numerosos años de experiencia en inversión sostenible.

¿Por qué no basta con excluir todo lo que sea un riesgo climático evidente?

Ya excluimos a las empresas que, claramente, no pueden cambiar sus modelos de negocio por otros más respetuosos con el clima, como las de carbón térmico. También excluimos a las empresas dedicadas a las arenas bituminosas o a la perforación en el Ártico, dentro de ciertos límites. Nuestra política de exclusión también descarta áreas en las que, por cambios fundamentales en los mercados debido a problemas relacionados con los factores ASG, ciertas actividades serán insostenibles en el futuro. Pero el problema aquí es que, una vez excluida una empresa, no es posible interactuar con ella para tratar de mejorar su modelo de negocio. Tampoco se puede votar en su contra en las juntas anuales ni presentar resoluciones de accionistas. Por consiguiente, preferimos mitigar el riesgo de sostenibilidad interactuando con ellas. Esto resulta bastante eficaz para persuadir a los gigantes del petróleo para que avancen hacia las renovables.

¿Robeco anuncia todo lo que hace?

Sí. Mantenemos un compromiso firme de divulgación de nuestras políticas, porque creemos que la transparencia forma parte de un compromiso con la inversión sostenible. La estrategia de Robeco se resume en nuestra política de gestión del riesgo de sostenibilidad, disponible en nuestra web. También ofrecemos información sobre los riesgos de sostenibilidad en la documentación de los fondos, para que clientes e inversores dispongan de análisis de los riesgos de sostenibilidad relevantes para los productos. Todas las políticas sobre exclusiones, votación, implicación y demás están publicadas y, normalmente, se actualizan trimestralmente cuando es necesario, como en nuestra documentación sobre titularidad activa.

¿Esto es una revolución o una evolución?

Aunque el Reglamento de la UE trae consigo un cambio significativo, la integración de los riesgos de sostenibilidad es un campo en evolución. Es decir, que los datos, destrezas y tecnologías disponibles para identificar, medir y mitigar los riesgos de sostenibilidad y la posibilidad asociada de entenderlos mejor aumentarán progresivamente. Lo que ha conseguido el Reglamento de la UE es acelerar los avances en esta área e imponer la obligatoriedad de las divulgaciones. Pero esto no es una ciencia exacta. Para los inversores, es importante revisar con regularidad y, cuando corresponda, recalibrar sus procesos de integración de los riesgos de sostenibilidad, para asegurarse de seguir el ritmo de las innovaciones. Así que, en ese sentido, todavía queda trabajo por delante.